Tips para ser un mejor pianista

Escrito el 22/04/2022

Convertirse en un mejor pianista requiere tiempo y esfuerzo

¿Te acabas de apuntar a clases de piano? ¿Has tocado el piano durante años pero no pareces mostrar signos de mejora? Las personas que tocan el piano, ya sean profesionales o aficionados, siempre deben aspirar a ser mejores pianistas y músicos. Ya sea que hayas estado tomando lecciones de piano durante media década o que aún no hayas tocado el instrumento, la mejora y el progreso son clave. Desde mejorar la fuerza de los dedos hasta desafiarte constantemente, aquí hay algunas formas diferentes en las que puedes convertirte en un mejor pianista.

Administra tu tiempo de práctica

¿Solo practicas cuando tienes tiempo libre? Esta podría ser la razón por la que no ha visto mucha mejoría. Practicar el piano no debe estar abajo en tu lista de prioridades. Si este punto se encuentra al final de la lista, debes programar un tiempo cada semana para sentarte y practicar tu instrumento. Ya sea que practiques todos los lunes, miércoles y viernes durante 30 minutos o dos horas, o todos los días de la semana durante una hora, trata de que nada te impida practicar. El compromiso con la práctica es tan importante para mejorar tus habilidades como encontrar el maestro adecuado. Si te encuentras con tiempo extra, añade una hora extra a tu rutina de práctica.

Practica la lectura a primera vista

Mientras te sientas y practicas la misma pieza musical hasta que la tocas perfectamente es una buena manera de practicar, cámbiala de vez en cuando agregando una pieza aleatoria a la mezcla. Cuando practiques la lectura a primera vista, no te preocupes demasiado por cometer errores. Simplemente toca la pieza de principio a fin con tu mejor habilidad y repítela unas cuantas veces más por si acaso. Este tipo de práctica no solo mejora tus habilidades de improvisación, sino que la lectura a primera vista es esencial para aquellos que estén interesados ​​en unirse a una banda u orquesta. Cuando cometas errores, no los mires como una decepción o una carga. Si consideras que los errores son una parte crucial del proceso de aprendizaje, probablemente descubrirás que practicar el piano será más placentero.

Desacelera un poco

Qué tan rápido se toca una pieza demuestra la verdadera habilidad de un músico. Si bien en algunos contextos esto puede ser cierto, aquellos que tocan demasiado rápido pueden comenzar a perder notas y tocar de manera descuidada. Si te faltan notas en una sección en particular, no te apresures por esa sección lo más rápido posible: pausa el metrónomo , reduce la velocidad y practica hasta que lo hagas bien. No importa qué tan bien creas que conoces una pieza o canción, practícala a un ritmo más lento cada tres o cuatro repasos. Después de todo, si no puede tocar una pieza a un ritmo lento, ¿cómo puede esperar tocarla rápidamente?

Sigue desafiándote a ti mismo

Esto puede sonar como un cliché, pero te sorprenderías de cuántos pianistas dejan de desafiarse a sí mismos una vez que se vuelven semi-profesionales en tocar el instrumento. Así como un fisicoculturista debe levantar pesas más pesadas para volverse más fuerte, un pianista debe tocar continuamente más y más piezas difíciles para mejorar. Si no estás seguro de qué pieza musical debes elegir para desafiarte a sí mismo, pregúntele a tu instructor. Ellos sabrán mejor que nadie cuáles son tus fortalezas y debilidades, y deberían poder elegir una pieza que sea desafiante pero no imposible. Por ejemplo, si tienes dificultades para tocar con la mano izquierda, deberías poder elegir una pieza que se centre principalmente en la mano izquierda.

Asegúrate de que tus objetivos sean realistas

Ya sea que tu objetivo sea convertirte en un maestro de la teoría musical o memorizar tu última pieza de principio a fin, asegúrate de que los objetivos que te establezcas sean realistas. Si esperas convertirte en un genio tocando el piano de la noche a la mañana, piénsalo de nuevo: mejorar en cualquier instrumento requiere trabajo duro, dedicación y mucha práctica. Solo somos humanos y, como humanos, tendemos a soñar en grande. Si tienes dificultades para alcanzar tus objetivos, tómate un momento para volver a evaluarlos. Haz una lista y repásala con tu profesor de piano. Ellos sabrán si tus objetivos son realistas o demasiado elevados en función de tu conjunto de habilidades actual.

Aprende a tocar piezas clásicas

Si tienes la mentalidad de que “la música clásica es aburrida”, escúchanos. La música clásica puede no ser el género musical más interesante para aprender y tocar, pero puede ser técnicamente muy exigente. Una vez que comiences a meterte en algunas de las piezas más complejas, comenzarás a ver mejoras en tus habilidades técnicas. La música clásica no solo establece una base sólida de conceptos básicos sobre los cuales puedes expandirte, sino que también te desafiará a convertirte en un músico más completo.

Si nunca antes has tocado música clásica, las piezas de Bach y Chopin son un buen lugar para comenzar. Solo asegúrate de elegir piezas que te desafíen porque, después de todo, no mejorarás si solo tocas lo que ya sabes.

Practica tocar en público

Como pianista, es importante que te acostumbres a tocar el piano en público sin convertirte en un manojo de nervios. Si tienes una presentación o un recital en un futuro próximo, prepárate para el gran día organizando un mini recital para tus amigos y familiares. Ya sea que toques para una audiencia de uno o cien, sentirte cómodo durante una actuación es clave.

Una vez que te sientas cómodo tocando para tus padres, invita a algunos primos o amigos a un recital. A partir de ahí, comience a actuar en eventos privados, como fiestas navideñas, días de campo o funciones escolares. Eventualmente, tocar frente a otros no será gran cosa y esas palmas sudorosas y mariposas en tu estómago serán cosa del pasado.

Consigue un buen maestro

Una de las mejores cosas que puedes hacer para mejorar tocando un instrumento es aprender de alguien que es mejor que tú. Busca un maestro que te desafíe a ir a más en tu instrumento y permite que te instruya en el camino hacia convertirte en el pianista que siempre has soñado ser.

¡Nos leemos pronto!